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Un loft con corazón ajardinado de Egue & Seta

  • Jueves, 20 Febrero 2014
  • Escrito por  Voyeur Núria

Egue y Seta nos descubre su último proyecto, un bajo comercial convertido a loft, en el que apuestan por la vegetación y las transparencias como separadores blandos y sensuales. El equipo ha conseguido articular las zonas íntimas y sociales con apenas 10 metros lineales de pared, en un un espacio en el que transparencia y permeabilidad encuentran un nuevo referente. 

 

Una puerta doble de madera maciza de iroco barnizado con herrajes en hierro chorreado, nos da acceso a esta remodelada vivienda de Terrassa. Nada más entrar, nos encontramos una ‘pecera’ con una vegetación formada por especies locales de arbustos de diferentes tamaños sobre un lecho de corteza de pino, iluminado por la resplandeciente luz procedente de una falsa claraboya. Este jardín, en el corazón de la vivienda, da la bienvenida y nos acompaña en el resto de la casa que se desarrolla a su alrededor.

A continuación llegamos al salón, excavado en los cimientos del edificio, con escalones sobredimensionados en los que se ha colocado el elegante sofá en forma de U, cubierto por una ecléctica pero sutil mezcla de cojines de diseño. 

 

La zona de comedor y cocina junto al salón se encuentra en otro nivel. En el comedor, las atemporales sillas Eames en color hormigón, rodean la mesa Bedrock Plank A de la casa Riba 1920. Del techo industrial de vigas metálicas vistas en gris marengo, cuelgan dos conjuntos de bombillas de tipo balón transparente, perfecto para iluminar cualquier velada. Aportando un toque personal al espacio tenemos la motocicleta de colección de la derecha, que ha sido restaurada por la familia.

Ofreciendo una imagen limpia y sofisticada a la vez que acogedora, la cocina técnica e industrial combina grandes superficies verticales de acero inoxidable y encimeras de madera tratada. Una alacena transparente con puertas de cristal almacena a la vista, “delicatessen” locales, especies frescas, y vinos, sobre un fondo de pizarra y trazos de tiza. La isla central que es al mismo tiempo mueble de almacenamiento de menaje y zona de preparación, está rodeada por cinco taburetes metálicos ‘Bofinger’, que la convierten en barra y un lugar ideal para el desayuno. Todo este conjunto está iluminado por dos lámparas ‘Lindse’ que cuelgan del techo. 

En el lado izquierdo una pasarela de hormigón, junto a una pared desnuda de ladrillo artesanal, nos lleva a una hoja batiente de roble macizo que da a la parte más íntima de la casa.

En la habitación destaca el cabeceo de roble natural, que tras su aparente sencillez esconde un gran diseño, ya que es a la vez canapé, mesa de noche, cabecero iluminado, tabique divisorio y armario zapatero en su cara posterior. Desde la cama se puede gozar de las vistas al jardín central o mirar películas sobre una pantalla retráctil, que se esconde en el falso techo de madera. A un lado de la cama, se ha colocado un un sofá de dos plazas tipo Chesterfield de piel color tabaco y capitoneada de Francisco Segarra, sobre el que se encuentran dos cabezas de reno textiles de Luzio.

Tras el cabecero, tenemos el vestidor de líneas puras con moqueta a juego y un espejo de camerino de cuerpo entero. Es el espacio perfecto para disponer con comodidad la ropa de una pareja que disfruta de vestir bien y coleccionar zapatillas deportivas.

El cuarto de baño se distribuye de forma simétrica con dos inodoros y dos zonas de tocador independientes, separados por un gran plato de ducha. Las encimeras de lavabo a cada lado están formadas por un banco de hormigón encofrado, que atraviesa las mamparas de cristal. Dos espejos se descuelgan del techo frente a la gran ventana que da al jardín. 

Atravesando la habitación hacia el lado opuesto de la casa, un corredor de pavimento de roble nos lleva al escritorio, en el que mediante otro descenso de nivel en el suelo se consigue una agradable sensación de altura y amplitud. Un plano rechapado en acero corten aporta profundidad y textura al espacio de paredes blancas, al mismo tiempo que dialoga a nivel cromático con los sofás artesanales de asientos de piel y respaldo de lana gris que se han instalado sobre ‘palets’ con ruedas.

 

Antes de llegar al punto de inicio, nos encontramos con el baño de cortesía tras una puerta corredera. Con un esmaltado de arcilla artesanal y un esbelto lavabo tipo peana con grifo de suelo niquelado, este espacio da directamente al jardín. Un gran espejo permite asegurar nuestro aspecto, a la vez que refleja el jardín, trayendo al interior la frescura del verde paraíso de la casa.

 

 

Imágenes: www.vicugo.com y www.mauriciofuertes.com

 

Egue & Seta

C/ Casp 54 1º 1ª 

B 08010 

Barcelona


T+ 34 931 791 992

www.egueyseta.com

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